La decoración de nuestro salón es una parte muy importante que debemos tener en cuenta. De hecho, es la estancia en la que más tiempo pasamos a lo largo del día y, por supuesto, es el lugar donde solemos reunirnos con nuestros familiares y amigos gracias a la comodidad que proporciona esta estancia.
Esto se debe a que, entre el mobiliario del salón uno de los elementos principales es el sofá, el chaiselongue o los sillones. Todos estos elementos se suelen posicionar frente al mueble del televisor. Por lo tanto, es desde el sofá donde vamos a pasar más tiempo viendo nuestras series y películas favoritas y donde nos vamos a sentar a descansar al llegar a casa del trabajo o después de pasar el día estudiando.
Sin embargo, existe otro elemento que, además del sofá o la tele, no puede faltar: las mesas de centro. Se trata de un elemento clave que suele formar parte de cualquier sala de estar. De hecho, es un mueble al que se le da mucho uso, ya que resulta especialmente útil para colocar bebidas o alimentos. Pero también se pueden añadir otros objetos, como libros y elementos decorativos.
Sin embargo, hemos detectado que muchas personas cometen bastantes errores al combinar mesas de centro con la decoración del salón. Y es que, una de las cosas fundamentales, en este sentido, es hacer que todo el mobiliario se encuentre unido desde el punto de vista decorativo.
Es aquí donde la mayoría de la gente comete descuidos y termina arruinando el conjunto, ya que, cuando compras este tipo de mobiliario es para seguir usándolo durante bastantes años. Por ello, desde Sofá Club te vamos a mostrar cómo debes combinar una mesa de centro con la decoración del salón.
¿Qué tener en cuenta para combinar una mesa de centro?
Si quieres combinar mesas de centro, primero debes tener en cuenta algunos aspectos que no puedes pasar por alto. Por ejemplo, es recomendable pensar con cuidado cuál va a ser la función que va a cumplir este mueble. De esta manera, es mucho más fácil elegir una mesa que sea adecuada desde el punto de vista de la utilidad.
Es decir, no es el mismo caso un salón que se usa en contadas ocasiones y que está prácticamente para decorar que otro que se usa diariamente. Esto es importante tenerlo en cuenta, ya que debes tener en cuenta los materiales de la mesa de centro que vas a elegir. De hecho, puedes encontrarlas de madera, de hierro, de cristal, etc., y no todos proporcionan la misma durabilidad ante el uso continuado.
Ten en cuenta el espacio y el entorno
También debes tener en cuenta cómo es el espacio y el entorno, así como el estilo decorativo que predomina en la estancia. Puedes optar por seguir distintos criterios. Por ejemplo, puedes elegir una mesa de centro que se ajuste exactamente al estilo decorativo de los muebles que ya se encuentran instalados. Para ilustrarlo, diremos que, si tienes un entorno de aspecto clásico, puedes optar por una mesa también de ese mismo estilo.
Pero también puedes elegirlos para otorgarle a la estancia un contraste estilístico que le dé un toque más ecléctico. Así, si tienes un salón en el que predomina el estilo minimalista, puedes optar por añadir una mesa de centro de estilo clásico para aportar un poco de contraste a la decoración de la estancia.
En la misma línea, también puedes jugar con el color de la mesa de centro respecto al mobiliario preexistente. De esta manera, si los muebles son de color más claro, puedes optar por adquirir una mesa de color claro para crear una continuidad estilística. Sin embargo, también te puedes arriesgar y optar por combinaciones de colores más atrevidas, con inspiración en el Art Pop.
De esta manera, si los muebles son de estilo clásico y oscuros, puedes poner una mesa de color morado, rosa o verde intenso. En este punto hay que decir que no todas las combinaciones valen y que el resultado final depende de cómo encaje la combinación estilística y de color en dicha estancia.
Ten en cuenta el tamaño de la mesa y el espacio disponible
Llegados a este punto, es muy importante, para saber cómo combinar una mesa de centro, que su tamaño debe ser acorde al espacio disponible y al tamaño del resto de los muebles que ya se encuentran en el salón. De hecho, si vas a instalar una mesa de centro demasiado grande para un salón pequeño, el espacio dará la sensación de estar demasiado lleno y este mueble resultará demasiado aparatoso.
Si nos ponemos en el caso contrario, en que eliges una mesa de centro demasiado pequeña para el tamaño de la estancia, dará la sensación de ser insuficiente para llenar el espacio como es debido. Lo ideal es que sea del tamaño perfecto para el salón. Sin embargo, si no encuentras ningún modelo que encaje exactamente, siempre es preferible que se quede un poco pequeña a que sea excesivamente grande.
Asimismo, también es recomendable elegir una buena mesa de centro con el tamaño propio del propio sofá, ya que son dos elementos que siempre se suelen combinar. En cuanto al ancho, se recomienda que la longitud de la misma sea de la mitad de la longitud del propio sofá y, en cuanto a la altura, se recomienda que tengan más o menos la misma altura. De lo contrario, no creará armonía visual ni resultará un elemento cómodo de utilizar en el día a día.
La forma de la mesa es importante
Al igual que hemos comentado anteriormente, puedes jugar con las mismas formas que ya existen en la decoración de tu salón o utilizar una forma diferente para darle contraste. Existen mesas de centro cuadradas, rectangulares, redondas, ovaladas, etc.
Si decides, por ejemplo, seguir con las formas cuadradas en un salón donde estas predominan, el conjunto se verá armónico y equilibrado. Sin embargo, en este mismo salón, si decides escoger una mesa de centro redonda u ovalada, romperás la estabilidad y le aportarás un mayor dinamismo. Esto, en muchas ocasiones, es de agradecer y le aporta un toque más interesante a la decoración de interiores.
En esta línea, también tienes la posibilidad de combinar mesas de centro de distintos tamaños, formas y alturas para aportar todavía más sensación de movimiento y dinamismo. Puede ser una combinación arriesgada, pero, si lo haces correctamente, puedes convertir tu salón en un verdadero ejemplo de decoración.
Esperamos que este artículo te haya resultado interesante. Así que, ahora que sabes cómo combinar una mesa de centro con el resto del mobiliario del salón, estamos seguros de que, siguiendo estos consejos, podrás conseguir combinaciones muy interesantes que, sin duda, ayudarán a revitalizar el aspecto de tu salón.